Cada uno de nosotros somos una flor que poco a poco se abre.
La llegada de la primavera nos regala un cambio en la naturaleza, un momento de renovación y movimiento en nuestras vidas.
Ahí donde miremos, vemos flores, los días se hacen más largos y eso nos permite iniciar nuevas etapas en diferentes aspectos de nuestra vida.
El movimiento se destaca por regalarnos un cambio sobre todo de actitud y de energía, como un impulso de la naturaleza a movernos, a observarnos y a buscar nuevas experiencias.
La práctica nos invita a movilizar cuerpo - mente para que ese impulso sea más poderoso y transformador.
En lo físico, abrazando la vitalidad y en lo emocional, dejando atrás preocupaciones y pensamientos negativos.
El movimiento siempre es el recuerdo del cambio, así como la naturaleza se renueva en cada ciclo.
Así que aprovechemos esta temporada de renovación para mover nuestras vidas en la dirección que deseamos, y para disfrutar al máximo de todo lo que la primavera tiene para ofrecernos.
¡Feliz primavera!
Con amor
Gabriela
